Fallece Wes Craven, uno de los directores emblemáticos del terror




Este mes finaliza con la noticia del fallecimiento de Wes Craven, uno de los directores estadounidenses más emblemáticos del género de terror y explotación slasher.

Su desaparición ocurre tras una lucha contra un cáncer cerebral. Su familia confirmó la noticia diciendo: “Es con profundo dolor que debemos informar que Wes Craven ha muerto hoy a la una de la tarde… Craven estuvo rodeado de amor, con la presencia de su familia y en su casa en Los Ángeles”.

En uno de sus últimos tweets daba un consejo que aplicó en su vida: “Toma el primer trabajo que puedas en la industria donde quieres entrar. El trabajo no importa como sí tener los pies adentro”. Es que antes que apareciera su nombre acreditado en la primera película, había aceptado trabajos técnicos en el cine. Sus primeros pinitos en la dirección ocurrieron con películas porno, como recurso para subsistir con más dinero. Este trabajo lo hizo usando un seudónimo.

La primera película en la que figuró fue en la de su amigo el productor y director Sean Cunnigham (Viernes 13) con “Together”. Craven produjo el film, papeles que se intercambiarían cuando estrenó su polémica, pero taquillera y bien comentada ópera prima “The last house on the left” (1972), y que 38 años después llevó a las salas no como director sino como productor, acompañado nuevamente por Cunningham. En 1977 llegaría “La colina de los ojos malditos”, convertida en todo un clásico de culto en el que sus personajes son presa de un clan de caníbales y que produjo unas secuelas al igual que un exitoso remake supervisado por el mismo director.

Su notable reconocimiento hasta ese entonces fue empañado con “La cosa del pantano” (1982), para muchos una de las peores películas de este cineasta, cuya historia la escribió basándose en los personajes de la DC Comics creados por Len Wein y Bernie Wrightson. Fue una película en la que pasó del terror a la ciencia ficción, cambio que lo llevó a ser duramente criticado por ceder a los intereses de los estudios de Hollywood. Dos años después le respondería a los espectadores con “Pesadilla sin fin” (A Nightmare on Elm Street), que introdujo a uno de los villanos del terror más recordados del mundo, Freddy Krueger. Craven dirigió la película, escribió la historia y de su mente salió el temido hombre desfigurado, con su saco a rayas de color verde y rojo, su sombrero y un guante de afiladas cuchillas con el que asesinaba en sus sueños a sus víctimas, siempre adolescentes.

El éxito comercial convirtió en icono a Krueger y, literalmente, en pesadilla a toda una generación que en su mente replicaba el sugestivo cántico que anticipada su entrada en los sueños: ” Uno, dos, Ya viene por ti. Tres, cuatro, cierra bien la puerta. Cinco, seis, toma el crucifijo. Siete, ocho, no duermas aun. Nueve, diez, nunca dormirás”. De “Pesadilla sin fin” hubo secuelas, remake, videojuegos y una serie de televisión que terminó de popularizarlo.

Al tiempo que lanzaba películas bien recibidas por el público en salas, alternaba con películas y series para televisión como “Stranger in our House” o “La dimensión desconocida”. De su cáncer no se conocían detalles y toma por sorpresa a los seguidores que ha cosechado durante estos 30 años e incluso a sus colegas como Deepak Chopra que expresó estar sorprendido por la “muerte repentina” de Craven, a quien vio hace dos semanas y se veía en “buena forma”. Craven seguía activo, de hecho, en abril se había confirmado que preparaba el remake para televisión de su película “The people under the stairs”. También se dijo que adaptaría para la pantalla chica el comic “The Disciples” de Steve Niles.

En la década del noventa, el producto estrella de Wes Craven fue “Scream” (La máscara de la muerte) que con su mezcla de horror y parodia convenció hasta la crítica, la llevó a la creación de una franquicia que tuvo su última secuela en 2011 y una serie de televisión.

En los últimos 15 años, Wes se dedicó más a la  televisión  que al cine produciendo y escribiendo historias. La dirección para el séptimo arte la dejó para tres proyectos: “Paris Te amo”, dirigiendo uno de los fragmentos de esta película coral. También estuvo al frente de “Cursed”, no muy bien recibida, al igual que “My soul to take”, estrenada en 2010.

Craven también se reservó espacio en sus producciones para hacer varios cameos. Uno de los más notables es cuando interpretó a Freddy para “Scream”. En esta franquicia apareció en otras ocasiones como turista, hippy o un coronel. Craven también escribió para el mundo del cómic y publicó una novela a modo de thriller titulada “Fountain Society”.

Wes Craven fue mentor en las carreras de actores reconocidos como Johnny Depp y Courteney Cox, quienes participaron muy jóvenes en “Pesadilla sin fin” y “Scream” respectivamente.

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