Sep 1 2023 16:50

Reseña ‘El Último Viaje del Deméter’: Drácula ha resurgido

Por Juan Camilo Ardila (Twitter: @juanardila87)

‘El último viaje del Deméter’ es una sorprendente película de terror que revitaliza la figura de Drácula.

Lo confieso: uno de mis placeres poco conocidos es meterme en una sala de cine para ver una película de la cual no tengo ninguna información ni expectativa y, al salir de la sala, se dibuje en mi rostro una sonrisa de satisfacción. Muchas veces me llevo un estrepitoso fiasco pero, en ocasiones, como me sucedió recientemente con ‘El último viaje del Deméter’, le aplaudo a mi intrépida alma cinéfila por las decisiones que toma a menudo.

Mi única información sobre la película era su título. Y ya cuando estaba sentado en la silla de la sala de cine empecé a recordar muy vagamente que en un capítulo de la novela ‘Drácula’ de Bram Stoker se relataba este viaje del barco Demeter que salía de Transilvania hacia Londres. De hecho, desde que en mi adolescencia leí el libro, Drácula se convirtió en mi monstruo preferido. Luego lo pude ratificar cuando vi los Monstruos Clásicos de Universal y las películas de la Hammer. Y, lógicamente, la versión de 1992 de Francis Ford Coppola de la novela de Stoker, con un espléndido Gary Oldman interpretando al conde más querido por los amantes del terror es uno de los tesoros más importantes de mi videoteca.

Sin embargo, las terribles adaptaciones que en el siglo siglo XXI han salido de Drácula me han generado una profunda indiferencia. Este mismo año se estrenó ‘Reinfeld’ con el enorme Nicolas Cage y, aunque la película tiene momentos divertidos, salí del cine con el mismo desapego que le tiene un vampiro a la luz del sol. Por lo tanto, además de escasa información, mis expectativas bajísimas sobre esta película que iba a ver, me hacían pensar que iba a pasar un par de horas con mala cara ¡y vaya si me llevé una sorpresa enorme!

Ambientada en 1897, la película comienza cuando el Demeter está a punto de zarpar de Transilvania con una tripulación liderada por el capitán Eliot (Liam Cunningham). Entre sus acompañantes, se encuentran el primer oficial Wojchek (David Dastmalchian), su nieto Toby (Woody Norman) y Clemens (Corey Hawkins), quien es reclutado como el médico del barco. Sus conocimientos resultan muy útiles cuando una de las cajas se abre accidentalmente y se descubre a una aparente polizona (AislingFranciosi) con una misteriosa enfermedad que requiere numerosas transfusiones de sangre.

Pronto empiezan a ocurrir cosas muy extrañas en el barco. Todo el ganado a bordo y el querido perro de Toby son sacrificados a lo largo de una espeluznante noche. Los marineros empiezan a ver y oír cosas raras por la noche mientras están de guardia, e incluso las ratas del barco parecen haber desaparecido. Los miembros de la tripulación pronto empiezan a desaparecer y la paranoia y el misterio acerca de una figura monstruosa, que nadie puede ver, aumenta progresivamente durante la trama. Cuando Anna, la polizona, ayuda a revelar quién es ese monstruo, los pocos sobrevivientes que quedan intentan averiguar cómo detenerlo antes de llegar a Londres.

Las escenas cargadas de misterio y tensión en cada noche en las que los tripulantes intentaban descubrir quién era esa figura escondida detrás de las sombras están estupendamente bien dirigidas por André Øvredal, el cineasta y guionista noruego de este film, quien ya nos ha regalado grandes trabajos en el género del terror como las infravaloradas “Troll Hunter” (2010), “Historias de miedo para contar en la oscuridad” (2019) y “La autopsia de Jane Doe” (2016), probablemente una de las películas más destacadas del género en la última década.

En esta ocasión, Øvredal busca la manera de contar una historia en la que todos los espectadores vayan por delante de los personajes de la pantalla prácticamente en cada momento. Para ello, se centra sobre todo en el estilo visual, creando una atmósfera tétrica y embrujada -incluso durante las escenas diurnas- que resulta inquietantemente bella y espeluznante. Sin lugar a la exageración, ‘El último viaje del Deméter’ es una de las películas de terror más atractivas de los últimos años.

Los juegos del gato y el ratón entre Drácula y la tripulación se escenifican de una manera que sugiere una variación marinera de ‘Alien’, con su director aprovechando las escenas para conseguir la máxima tensión antes de culminar en asesinatos desagradables que merecían que esta película tuviese una calificación R (para mayores de 18 años). Además, la representación de Drácula que se muestra aquí es una variación particularmente grotesca y demoníaca que se asemeja bastante a esas figuras monstruosas que no conocimos en aquella joya del terror que es ‘El descenso’ (2005) de Neil Marshall.

Puede que ‘El último viaje de la Deméter’ no vaya a convertirse en un clásico de los anales del cine de Drácula, en la línea de la obra de Terence Fisher para la Hammer, ‘El horror de Drácula’, o la versión de Werner Herzog de ‘Nosferatu, vampiro de la noche’, ni tampoco acercarse al impacto de la ya mencionada ‘Drácula, de BramStoker’, de Francis Ford Coppola, pero sí puedo decirles que esta película se trata de una versión inteligente, bien hecha y, en ocasiones, francamente espeluznante, que tanto los aficionados al terror como los cinéfilos habituales al cine de acción y de aventura pueden apreciar por igual.

Para finalizar, les cuento que al salir de la sala de cine descubrí en Twitter la opinión de un cineasta que adoro y admiro muchísimo como lo es Guillermo del Toro. El director mexicano decía que la película ‘El último viaje de Deméter’ le había parecido “hermosa, espléndida y salvaje”, tres adjetivos que resumen a la perfección este muy buen largometraje que seguramente pasará sin pena ni gloria por las carteleras de cine del país. Sin embargo, si tú estás leyendo este artículo, te invito a darle una oportunidad. Creo que no te arrepentirás.

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