Abr 17 2015 16:50

Reseña Crítica de El Elefante Desaparecido de Javier Fuentes-León

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

“La verdad se esconde justo detrás de uno”.

Después de debutar con “Contracorriente”, el director peruano Javier Fuentes-León estrena en cartelera colombiana El Elefante Desaparecido, también coproducido entre Colombia y Perú. La de Contracorriente era una historia de amor entre dos hombres que más que visualizar este tipo de relaciones, las humanizó y les dio un estatus de naturalidad.

En el Elefante Desaparecido tomó un camino distinto, aunque muchos dicen que sigue hablando del amor. Del drama amoroso pasó a la mezcla entre thriller psicológico y policíaco haciendo además un homenaje a la estética clásica del cine negro, contando una historia intrincada y ambiciosa sobre la pérdida y la difusa línea entre la realidad y la fantasía que a veces acecha a los escritores, confundido así su identidad. Más bien y de forma interesante, Javier Funtes-León ha incluido elementos fantasmagóricos y fantásticos en ambas películas. Su obsesión pareciese decantarse más hacia la pérdida (incluso la muerte) que hacia el tema del amor.

Debe saber el espectador que en esta película trabajará mucho más por descubrir el misterio. La historia se presenta a modo de acertijo en la que Edo Celeste (Salvador del Solar) es un conocido escritor de novela negra que se ha que quedado estancando con el final de su nueva obra. El protagonista de sus historias es el detective Rafaél Pineda (Lucho Cáceres), una especie de alterego que le va dejando pistas en modo de anagrama para que su creador encuentre a su novia que desapareció sin dejar rastro, justo el día en que un terremoto azotó a Perú (el de Pisco en 2007, de ocho grados Richter y de casi tres minutos de duración).

La línea entre lo imaginario y lo real se desvanece en el universo de este escritor y eso crea desafíos al espectador que lo mantendrán atento a la pantalla. El inconveniente con ello es que la historia se enreda demasiado, es demasiado ambiciosa y algunas situaciones no son tan ingeniosas, por el contrario resultan ingenuas, con muchos cabos sueltos y un tanto obvias.

El nudo tiene momentos densos, de mal ritmo y ambigüedad, que terminan haciendo perder el interés al paso que avance la película. El otro tema son las actuaciones, a ratos muy contenidas, poco naturales y a ratos con una emotividad que no termina encajando con esta historia. Angie Cepeda (una viuda cuyo esposo murió el mismo día en que la novia de Edo desapareció) es de los personajes contenidos y Andrés Parra, un fotógrafo que raya en lo sobreactuado, aunque no se venda como tal. La película sin duda es sostenida por la interpretación comprometida de Salvador del Solar.

Lo excepcional de esta película es el gran trabajo de fotografía realizado por el colombiano Mauricio Vidal, al igual que el diseño de producción a cargo de Susana Torres y los necesarios efectos especiales para este proyecto encargados a Bill Georgiou, quien tiene créditos en películas de Hollywood como “El Increíble Hulk”, “R.I.P.D.” o “Charlie St. Cloud”. Todos estos apartados técnicos juegan a favor de la película dándole el look y tono adecuado.

Lamentablemente EL ELEFANTE DESAPARECIDO quedó más intrincado de lo que la misma historia podía resistir, pero hay que celebrarle a Javier Fuentes-León varias cosas: querer contar historias diversas en su cine; abordar temas con cierta singularidad; y no quedarse en terrenos fáciles. Este largometraje se exhibió en el Festival de Cine de Cartagena 2015 dentro de la sección de “Galas”.

Ficha Técnica

Director: Javier Fuentes-León
Guion: Javier Fuentes-León
Duración: 110 minutos
Género: Thriller psicológico
Reparto: Salvador de Solar, Angie Cepeda, Andrés Parra, Lucho Cáceres, Tatiana Astengo, Vanessa Saba, Carlos Carlín, Toño Vega, Magdyel Ugaz
Fotografía: Mauricio Vidal
Dirección Arte: Susana Torres
Música: Selma Mutal
Efectos especiales: Bill Georgiou
Países: Perú, Colombia, España
Año: 2015