Jun 23 2015 22:01

Reseña de Poltergeist 2015. Cine paranormal para niños

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

“Ellos están aquí”

Poltergeist hace parte de un grupo relativamente reducido de franquicias o películas de horror que han logrado llevarse galardones o nominaciones en los premios Oscar. Poltergeist es uno de los clásicos emblemáticos de la década del ochenta que dio origen a una franquicia con dos secuelas que alcanzaron también otros reconocimientos. Poltergeist es de los pocos clásicos del cine que se han vuelto novela, además de representar el primer éxito cinematográfico de Steven Spielberg, que operó como productor y coescritor de esta historia.

Tocar un clásico de esta categoría, que se quedó en la memoria de la generación X casi intacta es bien pretencioso, pero ya los espectadores nos acostumbramos al desfile de títulos de dicha década por estos tiempos.

El remake de 2015 es dirigido por el británico Gil Kenan (del film animado Monster House) y su historia, al igual que la original, sigue a una familia compuesta por padre, madre y tres hijos, que se trasladan por necesidad financiera a un nuevo barrio que ha sido construido bajo lo que fue un cementerio. Desde su llegada la actividad poltergeist comienza a manifestarse.

Esta nueva película es casi exacta a la versión original. La mayoría de elementos y escenas destacadas de la antecesora están ahí: el árbol, el payaso, los muñecos, el portal, el televisor y la soga, además de algunas de las inolvidables frases o diálogos.

Lo diferente aquí es el aprovechamiento de la tecnología para ofrecer unos efectos visuales (de esos elementos característicos de esta película) y hacerla más creíble, ademas de utilizar el 3D. Pero lo que es novedad termina desaprovechado al dejar el guion con más comedia que horror. Se desvanece casi que por completo la esencia de Poltergeist, dejándola como una película donde hay poco de paranormal y sí mucho de cine familiar, de hecho su clasificación en USA fue de tan solo los 13 años y me atrevo a decir que incluso pudo ser menor. Termina siendo algo así como cine paranormal para niños (suena raro, pero para esta producción definitivamente no). Tampoco es astuta como para apelar lo suficiente a la nostalgia que produce recordar un film representativo para una generación.

A pesar de la indudable simpatía de todos los personajes, su irritante comicidad la dejan ofreciendo muy, pero muy poco. Es más, que se insinúe una posible secuela de este mal remake es perverso.

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