Ago 18 2013 23:02

Reseña: El Conjuro (The Conjuring), el actual fenómeno cinematográfico del cine de horror

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

” El demonio existe. Dios existe. Y para nosotros, como personas, nuestro destino depende de a cual decidimos seguir”

La sala se oscureció y yo anticipándome a lo que me esperaba subí las piernas. Las crucé, por supuesto. Es que El Conjuro ha despertado un entusiasmo por este desgastado subgénero sobre lo paranormal que eleva cualquier expectativa, además sabemos que se inspira en dos casos de la vida real (sí, no es uno solo) y de esto de la demonología, de los espantos y los espíritus malignos, que tanto respeto le tenemos los creyentes. The Conjuring viene de hacer una dignísima taquilla en USA y de ser primera en varios países latinos donde ya se ha estrenado.

Al igual que como recientemente hiciera Fede Álvarez con el remake Evil Dead, esta película ilumina los espacios, veremos entonces en detalle cada rincón de la casa en Rodhe Island a donde llega una familia compuesta de padre, madre y sus cinco hijas por allá a principios de los años setenta, sin imaginar que la gigante casa de sus sueños se convertiría en la casa del horror.

La ambientación setentera, la casa vieja, el papel de colgadura, el sótano, las camas grandes, los muebles tapizados en tela, la madera, la forma de vestir, las espantosas batolas a la hora de dormir (ya saben a cuáles me refiero) son suficientes para irme tensionando, incluso más de lo imaginado. Es que siente uno un aura similar a la aclamada El Exorcista. Claro, la época es cercana.

Es que algo que tiene esta película es que no inventa ninguna rueda. Los fanáticos de este subgénero saben qué esperar y esta película no les ofrecerá cosa distinta. Lo que sucede con El Conjuro es que sus salidas argumentales fueron muy bien pensadas y las actuaciones son muy naturales. Más me demoro yo en escribir estas líneas que esta película comenzar a espantar a los protagonistas y obvio, a mí. “Eché madres” (solté algunas groserías como no recuerdo haberlo hecho antes), salte literalmente de la silla, grité, me reí nerviosamente. Hace muchos años no me espantaba de esa forma con una película de horror.

El Conjuro narra los sucesos que ocurrieron a esta familia con calma, sin engañar mucho al espectador con trucos preconcebidos. Transcurre orgánicamente y como suele ocurrir con lo sobrenatural, a medida que avanza empeora. De lo miedoso, se pasa a lo terrorífico, lo explícito y muy fuerte. Realmente debería ser una película para mayores de 18.

Varios de los que vivieron esta experiencia viven aún, ellos fueron víctimas de una entidad muy poderosa que desde tiempo atrás, venía apoderándose de muchas almas. Una casa maldita que acabó con varias familias antes de los Perron, la familia que se puso en contacto con los expertos Ed y Lorrain Warren, los más populares demonólogos del momento y de la actualidad (aunque Ed ya falleció en el año 2006) para poner fin a semejante historia.

Fueron estos dos cazadores de espantos los que hace más 20 años le presentaron el caso a Tony DeRosa-Grund, productor de esta película, quien tuvo la oportunidad de oír las grabaciones de las sesiones que Ed y Lorrain practicaban en dicha casa. Desde entonces intentó llevarla al cine sin conseguir que algún estudio se interesara por ella. En 2009 tras leer la adaptación que hicieron los hermanos Chad y Carey Hayes, New Line Cinema, subsidiaria de Warner Bros., dio vía libre a la producción.

Una de las hijas de esta familia, Andrea Perron, ha escrito varios libros sobre sus experiencias en la casa, no todos los fantasmas les generaban terror, aprendieron a convivir con muchos de ellos. Ella junto a Lorrain Warren han aprobado la película, asegurando que es bastante fiel a lo ocurrido en realidad. Por supuesto esto la hace aún más tenebrosa.

Pero El Conjuro no solo habla de este caso, sino de otro que en la cultura estadounidense es muy popular: el de la muñeca embrujada Annabelle que en la realidad los Warren guardan a puerta cerrada en su miedoso y excéntrico museo de objetos endemoniados. Annabelle es aún más temible en este film, de hecho me recuerda al fantasma de mi infancia (Chucky). Es que la muñeca de trapo Annabelle ha sido inspiración de muchísimas otras figuras de terror en el cine como Billy en la franquicia de Saw o los jueguetes de “la casa de los muñecos diabólicos”.

El director de esta gran obra de horror es el australiano James Wan, un cineasta que se consolida en el género tras dirigir su película Saw y crear una buena atmósfera inquietante en Insidious, que tuve el éxito suficiente para garantizar una entrega más. De hecho, El Conjuro tiene varias referencias, que fácilmente reconocerán, a estas dos películas de este buen cineasta. Wan ha dirigido varios escenas memorables para este film.

En 38 días se filmó está película protagonizada por Patrick Wilson, quien ya había trabajado con el director y la gran actriz Vera Farmiga. Su presupuesto fue de 20 millones de dólares y ya se acerca a los 200 millones de recaudo. En Estados Unidos tuvo una apertura en taquilla de 41.9 millones de dólares convirtiéndose en el film de horror de mejor apertura, tratándose de un guión original, y en el caso de Warner Bros., es su película del género con las cifras más importantes durante los tres días que componen el fin de semana de estreno.

El Conjuro, que se conoce también como El Expediente Warren, se estrena el próximo 23 de Agosto en las salas de cine. Ya se habla de una secuela basada en más casos de esta pareja dedicada a sacar los demonios y espantos de las casas.

Ficha Técnica