Jul 21 2016 15:13

Reseña Mi gran noche, la comedia que protagoniza Raphael

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

Rapahel no solo como cantante ha demostrado ser un gran artista, sino también como actor. Quiere a las cámaras, ama el show, brilla con ellas, las sabe manejar y se toma la comedia en serio. El español suma desde 1963 más de 10 participaciones en películas, varias de ellas interpretándose a sí mismo, como la que en 2010 se encargó de contar su historia de superación tras detectársele cáncer de hígado y deber ser sometido a un trasplante (en Raphael: una historia de superación personal).

Desde ese entonces el español ha renacido y sin duda continúa siendo uno de los grandes exponentes de la canción romántica en iberoamérica. Precisamente ese regreso lo ha hecho emprender desde 2013 varias giras internacionales entre ellas la de “Mi gran noche”, uno de sus títulos más populares junto a “Escándalo” y “Digan lo que digan”.

La letra habla de un hombre que espera vivir su gran momento, al poder gozar y disfrutar a su amor y la vida. En la historia de esta película, Mi gran noche, hace referencia al festejo de la nochevieja y su tradicional show televisivo en España, que se prepara con cuatro meses de antelación. Ya desde ahí comienza el humor satírico de esta propuesta de Álex de la Iglesia. El show ni siquiera se graba en el propio mes, como para ayudar a que el aura del plató sea en realidad más orgánico.

En ese lugar han encerrado junto a los habituales presentadores a una cantidad de figurantes que deben repetir hasta al cansancio las mismas escenas y cumplir con las directrices del coordinador. Que subir una mano, que sonreír, que sorprenderse, que abrazarse, como si estuvieran con un familiar. Todo se hace mecánicamente, todo es una farsa, todo es actuación, deja advertido el director. El show central está a cargo de Alphonso (el mismo Raphael, con un nombre que también se escribe con PH), la máxima estrella de la canción, pero antes de su presentación está la de Adanne, quien está iniciando su carrera y ve en el veterano un modelo a seguir. Alphonso lo ve como una amenaza y Adanne tiene otros planes para él.

Todo es un caos y Álex de la Iglesia se encarga de resaltarlo creando situaciones absurdas y personajes patéticos que se odian o están llenos de miedos, todos muy diseñados al filo de la caricatura. El cineasta pareciera haber escrito Mi gran noche pensando en traer de vuelta al cine al cantante español. A medida que pasan los minutos y aparece Raphael, como un imán se apodera de la pantalla y su presencia se hace cada vez más necesaria. No veo posible a esta comedia negra, de actuaciones exageradas, casi como una pieza de teatro, sin la presencia de Raphael, es una historia que se le ajusta – y en realidad se luce.

El ácido humor del director español se enfila nuevamente al mundo de la TV y la farsa detrás del espectáculo, no solo por los trucos y engaños que se realizan para conseguir sorprender y mantener cautiva a la audiencia, sino por los profesionales detrás de ellas, con sus ilógicas místicas y egos inflados.

Mi gran noche es una película entretenida, con varios momentos de risa incontenible, pero reiterativa en su discurso y con falta de contundencia para convertirla en una efectiva sátira. Se pasa bien, pero es olvidable.

Ficha técnica

Director: Álex de la Iglesia
Guion: Jorge Guerricaechevarría, Álex de la Iglesia
Duración: 100 minutos
Género: comedia
Reparto: Raphael, Mario Casas, Pepón Nieto, Blanca Suárez, Carlos Areces, Luis Callejo, Hugo Silva, Terele Pávez, Carmen Machi, Carmen Ruiz, Antonio Velásquez
Música: Joan Valent
Fotografía: Ángel Amorós
Dirección de arte: Arturo García, José Luis Arrizabalaga
Vestuario: Paola Torres
Sonido: David Rodríguez, Nicolás de Poulpiquet, Sergio Bürmann
País: España
Año: 2015