Ene 3 2017 12:32

Reseña de Kiki, el amor se hace

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

“Tengo mis cosas y soy diferente, pero rara no soy”

Esta comedia española dirigida por Paco León recientemente recibió cuatro nominaciones para los Premios Goya 2017 que se celebrarán el próximo 4 de febrero: Mejor Actriz de Reparto, Mejor Actriz Revelación, Mejor Guion y Canción Original.

Cuatro nominaciones para una comedia cuando todos estamos acostumbrados a que el género se mantenga ausente en este tipo de galardones parecerían incluso muchas para algunos espectadores, sin embargo, cinéfilos en España consideran que Kiki, el amor se hace merecía más especialmente en categorías de mayor relevancia. En el medio El Español citaron al respecto: “Los votantes parecen confundir lo cómico con lo intrascendente o ligero, cuando Kiki tiene valores más que de sobra para ser nominada en categorías más importantes. El tópico de los cómicos que dice que es más fácil hacer llorar que hacer reír se confirma con nuestros premios de cine, que prefieren la lágrima a la carcajada”.

Kiki, el amor se hace es una historia atrevida, sexy y sensual (de verdad) que nos habla del amor y las distintas formas de llevar la sexualidad, que no son comprendidas siquiera por sus protagonistas. El amor y el sexo como deseo básico del hombre que tienen en ocasiones métodos no convencionales para manifestarse.

Son cinco historias inusuales: La de Paco y Ana, una pareja que quiere avivar la chispa de la pasión experimentando diferentes “técnicas” hasta que se aparece una vieja amiga que les despertará deseos desconocidos. La de Jóse Luis y Paloma, cuyo esposo tiene excitación sexual cada vez que ve dormida a su esposa, quien ha quedado en sillas de ruedas tras un accidente y está sumida en el enojo. La de Candelaria y Luis, una pareja a la que le ha quedado difícil tener un hijo y en esos intentos ella descubre que tiene orgasmos cada vez que ve llorar a su esposo. La de Natalia y Álex, una pareja bastante joven que tiene en ella una mujer con varias y extrañas preferencias sexuales cuyo novio intenta satisfacer a toda costa. Y la quinta, la de Sandra y Rubén, ella con problemas auditivos y una atracción sexual por los tejidos.

Así de disparatado como suena son las historias de Kiki, el amor se hace donde se habla de rarezas sexuales o filias, abordando directamente y con mucha jocosidad un tema tabú. El ingenio de un esposo que es “infiel” a su esposa de noche – pero con ella misma y mientras duerme -, las estrategias por lograr la satisfacción de esos deseos carnales sin ser descubiertos, lo absurdos que se cometen por ocultar esos sentimientos que por inusuales provienen del mismo cuerpo, hacen de esta historia un gran divertimento. Kiki tiene actuaciones creíbles que no traspasan el límite la caricatura aunque sus personajes están muy bien marcados y han sido exagerados.

La película transcurre en la fogosidad del verano madrileño, así que los personajes y todo el aspecto visual que, además de cuidado y detallado, está cargado de tonos cálidos, de paisajes atractivos y frutas de temporada veraniega que le dan una estética muy agradable y sensual.

Sé y conozco espectadores sensibles con estos temas y probablemente Kiki, el amor se hace no sea para ellos, porque además es honesta, visual y directa, pero si se sobreponen a los prejuicios y se dejan llevar por lo que propone esta película española, seguramente no se resistirán a su humor y mordacidad.

En cartelera (Colombia).

Ficha Técnica

Director: Paco León
Guion adaptado: Paco León y Fernando Pérez
Duración: 102 minutos
Género: Comedia
Reparto: Natalia Molina, Álex García, Paco León, Ana Katz, Belén Cuesta, Candela Peña, Luis Callejo, Luis Bermejo, Mari Paz Sayago, Alexandra Jiménez, David Mora
Diseño de producción: Pilar Robla
Montaje: Alberto de Toro
Fotografía: Kiko de la Rica
Mezclas: Pelayo Gutiérrez
País: España
Año: 2016