May 1 2018 10:09

Reseña Tully – El director de Juno y Up in the Air vuelve a trabajar con Charlize Theron

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

El reconocido productor, director y guionista de comedias como Juno, Up in the Air y Men, Women & Children ha lanzado este año en el Festival de Sundance Tully.

Jason Reitman vuelve a trabajar en esta película con la actriz Charlize Theron y la guionista Diablo Cody, quienes coincidieron en la gran comedia independiente “Young Adult”.

Si en “Adultos Jóvenes” veíamos a Theron como una escritora oculta en crisis, en esta película la vemos en similares circunstancias, pero desde su posición de madre. Ella interpreta a Marlo, una madre de tres hijos, entre ellos un recién nacido. Su hermano Craig le extiende la mano con una niñera nocturna, que aunque genera dudas en Marlo, poco a poco va formando un vínculo único con la joven niñera Tully (interpretada por Mackenzie Davis).

La historia tiene inspiraciones reales en la guionista Diablo Cody, quien al nacimiento de su tercer hijo se vio obligada a usar este tipo de servicios que para sus otros hijos se había negado. El descanso que le ofrecía la nana hizo que literalmente se enamorara de la cuidadora de su bebé al considerarla su salvadora.

La producción cuenta que partiendo de esa experiencia se creó una historia que hablara de la depresión posparto. “Queríamos contar una historia sobre una mujer que está abrumada con las exigencias de lo que significa ser padres después de dar a luz a su tercer hijo, sobre una mujer que los ama pero teme ser devorada por el rol de madre y dejar de ser ella misma”.

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Con una gran actuación de Theron, la película presenta una versión más realista, menos idealizada, de los sentimientos por los que pasan gran parte de las mujeres en ese estado y los enormes cambios que se sufren después que nacen los hijos. Mostrándose tal cual lo anunciaba previamente la producción como una Poppins moderna. “La versión sobre el embarazo y sus descontentos es tan ingeniosa como honesta… Dependiendo de la compañía con que se encuentre Marlo, ella tendrá una descripción mordaz y divertida de cómo se siente”, ha comentado la producción que además describe a la cuidadora como “una Mary Poppins moderna”.

Por su parte el director Reitman ha dicho que lo que más le gusta de esta historia es la idea de ver a una persona despidiéndose de su juventud. “Diablo escribió un guión que no solo habla de la idea de la paternidad, sino de ese momento en el que realmente tiene que cerrar el capítulo y despedirse de su juventud. Algo que me ha fascinado como padre mismo es que su hijo se convierte en ese espejo a través del cual uno recuerda su propia infancia y se da cuenta, por primera vez, de quién era cuando niño. Diablo utilizó brillantemente esta relación entre Marlo y Tully como una forma para que Marlo entendiera mejor a sus hijos y como una forma para que Marlo vea a través de Tully un espejo de sí misma”.