Abr 17 2013 00:00
Mentiras Mortales (Arbitrage) – Reseña
Por Sandra M Ríos U | |
Twitter: @sandritamrios |
Los dos reconocidos actores Susan Sarandon y Richard Gere protagonizan este sencillo y bien ejecutado thriller dirigido por Nicholas Jarecki. Bajo el título de Mentiras Mortales se estará estrenando el próximo 26 de Abril.
Los mejores papeles de Gere no han sido precisamente cuando ha hecho de seductor benévolo (aunque no le sientan mal y le han representado el cariño del espectador), sino en aquellos donde se permite incluirle a su figura atractiva un lado oscuro. No es la primera vez que hace un papel así, pero este personaje es decididamente un antagonista que él mismo no ha dudado en calificar de “infame”.
Este actor da un registro tan cautivador y logra un papel tan bueno en esta película, que sonó como firme candidato en las nominaciones pasadas a los premios Oscar. Es más, alcanzó a ser nominado como actor dramático en los Globo de Oro 2013.
Comienzo hablando de Richard Gere porque es parte fundamental en la esencia de esta película que podría verse como aquellas historias llenas de clichés. Él hace un papel fantástico.
Este actor interpreta a Rober Millar, un magnate que mantiene siempre en orden su vida laboral y sentimental, al menos esa la impresión que ha dejado en la alta sociedad, pero en realidad es un hombre con un serio problema de fraude por lo cual debe vender su emporio para tapar así su error y además de eso sostiene una relación extramatrimonial con una artista que sufre una inesperada desaparición. En adelante, ya no serán una sino dos difíciles situaciones que a como de lugar deberá tapar para dejar en limpio su buen nombre ante la sociedad y su hija que lo idolatra.
La película se mantiene dentro de los estereotipos que suele vender el cine comercial, no obstante, es capaz de realizar uno que otro giro en su trama que mantienen el buen ritmo y la expectativa constante sobre los sucesos de este hombre.
Es una ópera prima (exactamente la primera de ficción de este cineasta) que no se desgasta inventando propuestas para el género o refrescándolo, sino que se preocupa por hacer una ejecución esmerada y apropiada. El guión escrito por el mismo director es convincente.
Arbitrage, tiene la medida justa de entretención y lo que vendría siendo una película más independiente que plantea una sátira de lo que viene siendo el truculento mundo del Wall Street, de lo que genera la ambición, las apariencias familiares, de lo que es capaz de hacer el humano con el exceso de plata y por supuesto, la faceta menos galante de la alta sociedad.
Por cierto, en términos económicos “arbitraje” (título original de la película), hace referencia a un tipo de negociación que busca sacar ventaja de las diferencias entre los precios de un mismo activo, diferencias que muchas veces resultan por especulación o volatilidad.
Bastante recomendada.