Jul 12 2013 00:49

Reseña de El Llanero Solitario (The Lone Ranger) – En cartelera

	Por Sandra Milena Ríos y Alberto Duque Rincón
	info@cinevistablog.com - alberto.duque@cloudmail.com.co

Se estrena hoy la que posiblemente se convierta en el mayor fracaso cinematográfico de este 2013. El Llanero Solitario no ha sido bien recibida ni por la crítica, ni por los fanáticos que entusiasmados esperaron el regreso, ahora en la pantalla grande, de una de las series de televisión más populares de la historia estadounidense de la época de los cincuenta. El presupuesto de la producción ascendió a los 255 millones de dólares y apenas ha logrado hacer en taquilla global 81,9.

El film se estrenó una semana antes que en nuestro país, y a pesar de las malas cartas de presentación con la que llegaba, era impensable imaginar que el regreso de este mítico personaje del género western resultara, en efecto, tan flojo. Es que dudar era válido; Disney invirtió un presupuesto tan elevado como para garantizar un buen espectáculo y a la dupla Depp/Hammer se le notaba cierta química.

Pero definitivamente dos cosas fallaron en El Llanero Solitario: el guión resulta absurdamente débil y a Jhonny Depp le está quedando absolutamente difícil salirse de la sombra de Jack Sparrow. Pasó en El Turista, Los Diarios del Ron y vuelve a repetirse aquí, dejando esa sensación de estar viendo un rezago de lo que ha sido el personaje principal de Piratas del Caribe. Es que gran parte del fracaso de esta película, podemos decir que se debe a esto, porque es lo primero que desconecta al espectador con la historia.

Si tratamos de darle una calificación a la película, tal vez la que mas se acerca, sería la del mismo adjetivo que corresponde al nombre del personaje Toro en inglés, “tonto”. Depp no solo logra repetirse con su papel de Jack Saprrow, que en vez de estar vestido de pirata y borracho con la mano siempre “quebrada”, es ahora un indio, con un cuervo muerto en su cabeza, que tiene un maquillaje inspirado en las pinturas de indios nativos americanos creadas por Kirby Sattler y que además, se la pasa haciendo gestos a lo Buster Keaton (una mal copia de lo que fue este emblemático actor de cine mudo cómico).

Nos preguntamos (se preguntará todo el mundo) el por qué han elegido a Johnny Depp para este papel. Esa parte chéroqui de su descendencia, no le da los créditos suficientes para este film, pero quizás sí, el hecho de lo cómodo que Gore Verbinski, el director, se siente trabajando con él. Recuerden que hasta en la animada Rango, Verbinski contó con la voz de Depp para el personaje principal. Acaso, ¿no era fácil encontrar un actor con rasgos más indios?, o volviendo aquello de ser el actor mejor pago y el más taquillero, ¿era mejor tenerlo en el cartel para asegurar entradas?

Tres manos (Justin Haythe, Ted Elliot y Terry Rossio) escribieron este guión que le da vueltas innecesarias a la trama, carece de giros sólidos y falta de malicia (suponemos que esto último se sacrifica en aras de hacer de ella una película más familiar). The Lone Ranger, es una película que en pocas cosas referencia la historia original, pero que tampoco se arriesga demasiado con su historia.

Pero bueno, si algo tiene positivo esta película es su banda sonora a cargo de Hans Zimmer. Plenamente disfrutable son las trompetas de la obertura de Guillermo Tell de Rossini, que es el tema de El Llanero Solitario, o como diría un amigo periodista, la “fanfarria” de la serie, que se deja escuchar solo en los momentos claves.

Escucharla acrecienta la ilusión de volver a oír la inolvidable frase de “Hi-Yo Silver”, mientras se ve la silueta del enmascarado sobre su fiel corcel blanco como la nieve. Pero esa es otra de las cosas que se quedan a medio camino en la película, cuando vemos que un “tonto” Toro lo regaña y le dice: “No vuelvas hacer eso”. Por el contrario, muchos seríamos los que le diríamos: “No, por favor, no le hagas caso. Sigue diciéndole. Es tu frase victoriosa, tu identidad”.

La historia de El Llanero Solitario comienza en un San Francisco, donde no han terminado todavía el Golden Gate y apenas han pasado un par de años después de la Gran Depresión. Un muchacho joven, disfrazado de vaquero y antifaz, (justo como El Llanero Solitario), entra a una exposición del viejo oeste y ahí en medio de búfalos disecados, encuentra la estatua del noble aborigen en su estado natural. De repente cobra vida y confunde al joven con el gran héroe. “Kemo-Sabe, ¿eres tú? Le pregunta. Y así comienza la historia narrada por el mismísimo Toro (Tonto), de cómo un joven comisario se convertiría en una leyenda enmascarada: “Llega un momento en que el hombre bueno debe usar máscara”, le narra al pequeño.

De esta manera entre comentarios chistosos y gestos de sus personajes, rescatamos a Helena Boham Carter, como la dueña de uno de los burdeles, con una pierna de escopeta, sacada de una película de Robert Rodriguez (bueno, algo de entusiasmo hay que permitirse sentir). Aunque debemos reconocer que su personaje, junto a otras tantas situaciones de la película, son añadiduras que extendieron su metraje hasta unas largas dos horas y media.

Debemos también que reconocerle el trabajo al cada vez más cotizado actor, Armie Hammer, quien le tocó la difícil tarea de no dejarse opacar por la figura y el histrionismo de Depp y encarnar a un llanero adaptado a este tiempos.

Pero, ¿qué hace al Llanero, EL LLANERO? Definitivamente su uniforme de cowboy, su antifaz, su pañoleta roja, su caballo blanco y su otra marca; las balas de plata. Todos sabían que la promesa de justicia del llanero iba siempre ligada a una bala de plata. El solo hecho de verla aseguraba a todos que alguien estaba velando por ellos y que se haría justicia: “justicia es lo que busco”, dice el llanero cuando es convencido de usar la máscara.

Eso sí, antes de que salgan de la sala, disfruten los créditos con una preciosa imagen, capaz, posiblemente, de quedarse en el recuerdo, como una de las más hermosas del cine de este año; nostálgica y simbólica en la que vemos al viejo indio regresando, por fin, a casa. Cumplidas las promesas…solo queda regresar.

Ficha Técnica

Director: Gore Verbinski
Género: Aventura
Duración: 149 minutos
Guión: Ted Elliot, Justin Haythe, Terry Rossio
Reparto: Johnny Depp, Armie Hammer, Tom Wilkinson, William Fichtner, Helena Boham Carter, James Badge Dale, Barry Pepper
Música: Hans Zimmer
Edición: Craig Wood, James Haygood
Cinematografía: Bojan Bazelli
País: Estados Unidos
Año: 2013