Nov 2 2013 22:10

Reseña de Jobs. Ashton Kutcher con su carisma se enfrentó a su papel más importante

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

“Dejemos huella en este universo”

“Porque los locos que creen que pueden cambiar el mundo, son los que lo hacen”

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¿Es el biopic de Steve Jobs una buena película biográfica? La respuesta a esta pregunta se la responderá cada lector acorde al sentimiento que despierte en él Steve Jobs, y qué tan profundo conoce de su vida y obra. Jobs, como todo hombre de negocios, despertó odios y amores tanto en el plano personal como en los públicos.

Si usted es de aquellos que de Jobs sabe someramente que fue el fundador de Apple, que hizo un histórico y visionario discurso en la universidad de Standford en 2005 y que revolucionó el mundo de los gadgets, seguramente esta película (la primera en aparecer después de su muerte) le proporcionará algunos detalles adicionales desconocidos, y que en aras de venderse con imparcialidad muestra también un poco la complejidad de su personalidad y sus relaciones en la vida privada.

Jobs, la película, funciona como una biografia para “dummies”, es decir, aquellos iniciados en su obra, su creación y su filosofía. Pero también hay que reconocer que se trata de una versión bastante plana, rayando en lo documental, que habla de sus inicios en la época en la que trabajaba como empleado de Atari, hasta el momento en que regresó a su propia compañía, después de haber sido echado, para darle el triunfo que hasta hoy disfruta la gigante tecnológica. Ese transcurso del tiempo no cubre la etapa en la que Jobs es diagnosticado con cáncer, sus decisiones sobre la enfermedad y posterior muerte temprana.

Esto último se explica porque esta producción se estaba realizando desde mucho antes de su muerte y por lo visto no contemplaron la posibilidad de tocar de nuevo el guión para incluir este suceso importante en la vida de este visionario y la historia de dicha industria, por lo que este repaso superficial ha quedado sin duda incompleto, a pesar de cubrir un amplio margen de su vida que va desde 1974 hasta 2001, fecha en la cual Steve Jobs presenta al mundo el Ipod.

La película no logra el grado de intriga que consigue otros films referenciales como “Piratas de Silicon Valley ” (la de la rivalidad sabida entre Bill Gates y Jobs) y La Red Social (la de Mark Zuckerberg el creador de Facebook), pero aún así, es una película que se sostiene por la destacada transformación de Ashton Kutcher, quien llevó al límite sus cambios físicos para acercarse a su personaje. La voz, su forma de hablar y caminar, como también su extrema delgadez producto de una dieta estricta rica en fructosa. De hecho, Kutcher optó por esta dieta un tiempo y debió ser hospitalizado por ello. Este actor con esta película se enfrentó sin duda a su desafío más grande, pero igual a como lo hace en la comedia, su carisma lo deja bien plantado.

El film hace también un gran trabajo a la hora de recrear varios hechos que marcaron la vida de Jobs y la historia de la compañía: la gran lograda escena inicial con su presentación del keynote de Ipod, las primeras 50 boards del Mac, la evolución de los logos de la compañía o la grabación de la emblemática publicidad con el eslogan “Think Different”. Buenos momentos que se recordarán de esta biografía, eso sí, poco profunda, poco ambiciosa y un tanto larga.

Desde este fin de semana en cines.

Ficha Técnica

Director: Joshua Michael Stern
Género: drama, biografía
Duración: 122 minutos
Reparto: Ashton Kutcher, Dermot Mulroney, Josh Gad, Lukas Gad, Lukas Haas, J.K. Simmons, ROnd Eldard, John Getz, Matthew Modine
Edición: Robert Komatsu
Cinematografía: Aseem Bajaj, Russell Carpenter
Música: John Debney
País: Estados Unidos
Año: 2013