Ene 11 2022 16:47

Películas favoritas de 2021 – Lo mejor de mi año

Por Daniel Andrés Ruiz Sierra (@Tato Ruiz)

El 2021 y el año anterior han acabado con mis constantes visitas al cine. El 2020 por lo obvio y el 2021, a falta de una cartelera honestamente magnífica. Y no porque no haya con qué, es solo que en el país al que decidí mudarme, el ritual del cine, ya de por sí maltratado por la presencia del bicho ese, parece relegado en la fila de intereses. Pero quejas aparte, durante 2020 y 2021, he podido acceder a una interesante lista de títulos gracias a quienes facilitan enlaces de visualizado a películas de estreno (por temas de prensa y promoción), y a las plataformas, que se han convertido en acompañantes magníficas y tabla de salvación.

No he visto tanto como quisiera, pero me parece que sigo dedicándole mucho tiempo (afortunadamente) a la tarea de sumergirme en los universos planteados por directores y directoras debutantes, con corta y larga experiencia, o aquellos que me obsesionan. Gracias a este espacio cedido por Cinevista Blog les comparto un listado muy personal de lo que vi durante el 2021 y me voló la cabeza. O bueno, también esas películas que me llegaron hasta el tuétano, por la emoción que me produjo y no necesariamente porque terminaron de joderme el coco. En todo caso, un pequeño listado que, lejos de competir con ese montón que es posible ver a finales de año, es un reconocimiento a lo que merece ser recordado y recomendado. Aquí va:

Fue la mano de dios – Paolo Sorrentino (2021)

La propia celebración de la vida, de estar vivos, de lo estrambótico y de lo excesivo, de lo que está más allá de la realidad. También es la celebración de la tristeza, lo ordinario y nefasto de ella. ¡Una joya inolvidable! Lee aquí la reseña.

The power of the Dog – Jane Campion (2021)

Auténtica deconstrucción de lo masculino, precisamente en un relato ubicado en una zona geográfica y un oficio (la ganadería y el pastoreo) que, por antonomasia, exuda masculinidad, fuerza bruta, salvajismo, y con un género cinematográfico que, por décadas, ha pertenecido al hombre, que los relata, y los protagoniza. “The Power of the Dog” ofrece esa deconstrucción a través de un viaje a lo perverso y a la venganza en clave homoerótica y juegos de poder. Como no hace películas con regularidad, cada que Jane Campion aparece es una fantástica nueva oportunidad para dejarse llevar y sumergirse en universos tocados por lo sublime, lo inmenso y lo grandioso de la fragilidad humana. Lee aquí la reseña.

Las niñas – Pilar Palomero (2020)

Un viaje al inicio de la pubertad. “Las niñas” tiene un abanico de temas que su directora ha sabido dosificar y desarrollar con sutileza. Es una película inolvidable por la honestidad que destila, por su minimalismo y esa búsqueda de realismo que obliga a armar complicidad con nosotros, su público. Cuando vemos a Celia en ese camino suyo tan vigilado y tan controlado, no podemos sino pensar que en algún momento todo cambiará para bien. Y Palomero nos da algo esperanza en esos últimos minutos, en plena presentación musical, esa que ensayaban al inicio, y tenía que salir tan bien. No voy a contar qué final tiene, pero sí voy a decir que esos últimos minutos son tremendamente fascinantes. Un cierre más que digno, y como confesión, me sacó unas cuantas lágrimas. Lee aquí la reseña.

Annette– Leos Carax (2021)

Adam Driver es todo en esta película. Ese personaje al que da vida es provocador, imperfecto, extremo. Totalmente humano. Qué fascinante ese viaje de su personaje al mismísimo infierno. Supongo que interpretar algo así debe ser todo un placer para cualquier actor que se jacte de serlo. Una más que atractiva pieza de muchísima intensidad. Un artificio que mezcla teatro, ópera y musical empalagoso. Es una película que merece toda la atención; ser alabada y promocionada donde se pueda. Lee aquí la reseña.

Nomadland – Chloé Zhao (2020)

Una película con una atmósfera tan especial y una sensibilidad tan enorme y rara por estos tiempos, que sorprende (y no) que anduviese en esa estrambótica temporada de premios. Nomadland narra un conflicto con mirada profunda, que pone como excusa la carretera y el viaje físico y agotador para explorar la simpatía y la compasión por el otro. Una suerte de estudio social a una serie de personalidades que no encuentra espacio en el mundo capitalista, y donde las ambiciones humanas se traducen a cosas materiales. En medio de la soledad, y la desprotección absoluta, se logra conseguir un profundo sentido a los caminos de la vida, a la idea de reencontrarse con uno mismo en un viaje sin retorno. Lee aquí la reseña.

The Lost Daughter– Maggie Gyllenhaal (2021)

Estrenada el último día del año vía Netflix, fue también la última película vista. La espera valió la pena porque este debut de Maggie Gyllenhaal ha sabido tejer angustia y suspenso con mucha sobriedad. Lo mejor de ella es ese reparto encabezado por la que, supongo, debe ser una señora magnífica en la vida real, Olivia Colman, que da vida a una mujer solitaria por decisión, y a quien la maternidad de una extraña interpretada por Dakota Johnson le despierta una serie de recuerdos dolorosos y complejos. Ojalá la película consiga un reconocimiento mayúsculo, y ojalá un buen grupo de personas pueda llegar a ella. Se me hace una película muy moderna, que sabe contar un tema tan presente como urgente: que hay varios tipos de madres en la vida y que antes de madres, lo que hay son mujeres con sueños, personalidades complejas y objetivos distintos en la vida.

Another Round – Thomas Vinterberg (2020)

No es muy usual encontrarse con propuestas cinematográficas que aborden con tanto cinismo, profundidad y conmoción la crisis masculina y el fracaso. Un relato completamente realista y que solo en su final se atreve a dar un salto que resulta poético, fantasioso e ilógico. Una borrachera de honestidad. Lee aquí la reseña.

El agente topo– Maite Alberdi (2020)

Un ejercicio narrativo que abarca ficción y documental que le sirve a su directora para hacer una reflexión sobre el olvido y todo ese tono despectivo que activamos cuando las personas se van haciendo mayores, pensando inmediatamente que no son dignas de prestarle atención. Si con “La once” Maite se hacía promesa, con El agente topo marca la importancia de su nombre y estilo en el cine chileno, que en la última década se ha dedicado a lanzar películas dignas de alabar. Lee aquí la reseña.

Errante corazón– Leonardo Brzezicki (2021)

Fuera de Argentina fue estrenada a través de HBO Max. Un retrato fiel del descenso a los infiernos de un hombre de clase media que carga en sus hombros el caos que él mismo ha provocado. La segunda película de Leonardo Brzezicki es compleja e intensa. Con ella su director ha sabido relatar un mal de estos tiempos: el descuido de los problemas mentales, las adicciones, las fracturas emocionales y la poca empatía para dar apoyo a quienes nos rodean. Y con ello no quiero decir que esta película sea pedagógica, pero uno sabe reflejarse en lo que Brzezicki cuenta a través de un potente Leonardo Sbaraglia. Una joyita argentina y de la región que no ha tenido el protagonismo que merece. Un trabajo que sigue poniendo a su director como una promesa a la que no hay que perderle el rastro.

The Father – Florian Zeller (2020)

Tremendamente conmovedora por ese precipicio al que van cayendo sus personajes mientras intentan no hacerlo. Y vale la pena perderse en esos poco más de 90 minutos. Te golpea fuertemente. Hay secuencias donde el llanto es inevitable, porque lo que consigue transmitir Hopkins es de un dolor y una conmoción profunda. Lee aquí la reseña.