Jun 15 2011 01:25

Sin Límites (Limitless) – Reseña

	Por Sandra M Ríos U
	Twitter: @sandritamrios

“Todo es posible cuando abres tú mente”

Otras opiniones en la web

“En el ‘Charly’ que Ralph Nelson dirigió en 1968, adaptando la excelente novela ‘Flores para Algernon’, de Daniel Keyes, una premisa de ciencia-ficción (un hombre con retraso mental progresaba en su coeficiente de inteligencia mediante un experimento con drogas) era la excusa para psicoanalizar la sociedad de esos años de hippismo, lsd, feminismo y movimientos liberales. En el fondo, el viaje en montaña rusa de un iluso feliz e ingenuo hacia la alta conciencia e inteligencia, era más que nada el anuncio de una tragedia anunciada, básicamente la misma que siempre ha tenido el género de la ci-fi: no puedes retar a Dios, porque más dura será la caída. ‘Sin límites’ es asimismo una nueva propuesta fantacientífica en términos de realismo (y de moralismo. su desacertada conclusión), y su realismo teine un objetivo hacia el que apunta: el desmoronamiento del capitalismo ejemplificado en la crisis finaciera que estamos viviendo”. Fausto Fernandez en Fotogramas.es

El Sitio Oficial: http://www.limitless-movie.co.uk/

Limitless es la última película del cineasta Neil Burger a quien muchos recordarán por su dirección en “El Ilusionista” con Edward Norton. El nuevo film es Sin Límites, una película que aborda un tema atrayente e hipnótico como lo es el de las drogas nootrópicas e incluso yendo más allá, sobre el oscuro concepto del transhumanismo.

Para quien disfruta del cine como herramienta de escape, este film le resultará más que bueno pues tiene todos los ingredientes para hacer pasar un rato ameno: el guión es de cierto modo novedoso, muy actual, la trama está bastante bien desarrollada, de buen ritmo, efectos, sonido, montaje y muy buenas actuaciones. Total, una película redonda en líneas generales.

Bradley Cooper, el protagonista de esta historia hace un papel bastante sobresaliente y el mejor que haya hecho hasta el momento. Su compañero, Robert de Niro resulta tan sutil y siniestro como Al Pacino en “El Abogado del Diablo”.

Pero lo más interesante del film es su temática y lo conveniente para la famosa agenda Illuminati. ¿suena extraño? para muchas personas sí, pero para alguien como yo que lleva los últimos 3 años investigando sobre ésta y otras sociedades secretas, el film aplica como una perfecta propaganda.

Basada en el libro The Dark Fields, la película toca un tema muy estudiado desde mitades de los años ochenta por la biología celular sobre los campos oscuros conduciendo a la medicina llamada “factores de transferencia” y de la que ya médicos especialistas en biotecnología están recetando diversas cantidades de productos haciendo así una “mejora” de la genética humana.

Este grupo que no es otro cosa que un ala de la masonería y que no es un mito, ni producto de la imaginación de unos cuantos, en los últimos años ha introducido una campaña mucho más agresiva en su agenda. Por supuesto, el tema que propone esta película de una píldora que produce un despertar de las “partes oscuras” o subutilizadas del cerebro, pues no es más que parte de su filosofía y búsqueda de iluminación a través, no de la espiritualidad y la religión, sino de el conocimiento puro que les proporcionan las ciencias (para estas sociedades ocultas es muy importante el dominio de las ciencias como la geometría, la matemáticas, la astronomía e incluso la gramática y la magia).

No soy la única que después de este film quedó con una sensación incómoda de estar viendo una estrategia más de este grupo que sigue poniendo estampillas ante el mundo de su quehacer en libros, música, cine y demás. Algunas personas incluso aseguran que en este film aparecen señales numerológicas, algo que es vital dentro de su filosófia , y dicen que en ciertas escenas detectactaron números como el 911 (asociado al 11-S) o el 311 (asociado al 11 de Marzo, atentados en Madrid) . Yo a la escritura de esta reseña no lo he confirmado pues no me he repetido aún la película.

A este punto, algunos se preguntarán qué señales vi en la película que me llevaron a pensar en ésto, pues bien, el tema en sí del transhumanismo ha sido fuertemente vinculado a esta sociedad secreta como parte de la robotización del cuerpo humano y que incluye otros conceptos como el del control mental y el del despertar de conciencia.

El fin entonces de los Illuminati en mi concepto personal tras varias lecturas, es el de equipararse al poder del “Creador” a través del conocimiento y logrando así “hombres perfectos”, algo que ha ido sistemáticamente en contraposición de muchas religiones que han enseñado a temerle a ese Creador por ser el único que todo lo puede.

Sobre la robotización ya se hablado mucho en el cine y la literatura, basta remontarse al film “Metrópolis” de Fritz Lang en 1927 o el libro “Un Mundo Feliz” (Brave New World) del escritor Aldous Huxley publicado en el año 1932. Ambos referentes increíblemente futuristas.

Sin Límites introduce entonces ese nuevo planteamiento de la ética y la moral de la era moderna y deja en su final otra idea conocida por este grupo acerca de que el capitalismo estaría en un periodo de transición a un capitalismo basado no en los commodities sino en el intelecto humano.

Por ahí escondido pueden ver otras señales comúnes que se han asociado, con bases, a los Illuminatis como el triángulo y el ojo (escena de la puerta que atraviesan a la fuerza), el momento en que Eddie se alimenta de sangre humana y todo su discurso final que me hizo recordar a “El Abogado del Diablo” incluso por la transformada apariencia de Eddie, recordándome al reportero de este otro polémico film.

La píldora que hace de tí un hombre mejor está más que cerca de ser una realidad, de hecho en el año 2007, el Ministerio de Sanidad de Londres comenzó exámenes sobre las ya existentes “pildoras del conocimiento” que hacen a la gente que las toma mucho más inteligentes, pero siguen debatiéndose acerca de los efectos que pueden causarle no solo al cuerpo sino a nivel social al plantearse la preocupación de la creación de un estado global totalitario en el que se dependa de este tipo de medicinas para trabajar mejor y más cantidad. Es decir, explotar nuestro potencial no para nuestro único beneficio sino para fortalezar el poder de entidades y gobiernos enteros.

Como se ve en el film, Eddie Morra se siente extasiado por las cosas que puede procesar y realizar pero pierde contacto con la realidad como la conocemos, así como con sus amigos, pareja (por un tiempo), familia (no aparece por ningún lado) y por supuesto la religión, la fé tampoco está muy presente, no come, es decir, el tiempo en apariencia se “optimiza”.

El paralelismo con la obra de Huxley es inevitable y la paradoja que ahí plantea más válida que nunca. En su novela la sociedad es dotada de tecnología, de salud, no hay pobreza y no se conoce la guerra pero se pierden los valores de la familia y la religión, tampoco hay artes como la literatura y la filosofía. Pero en ese “Mundo Feliz” que el autor construye, las drogas no se utilizan para la iluminación y autodescubrimiento personal sino para el control de las masas, el sexo no es expresivo sino que no tiene importancia o significado alguno y las drogas para entrar en trance espiritual no son más que un instrumento para instalar doctrinas en masa. Morra podría ser en este caso, un iniciado en ese nuevo mundo, solo que en este film nos muestran la mejor parte, esa que hace que cualquiera, como ústed o como yo, le parezca “simpático” el hecho de probar esa píldora que nos presentaría lo mejor de cada sí.

Esto es lo que nos propone Sin Límites, una visión hacia un mundo no lejano que es tan tentador como peligroso. Una película que entretiene y tiene un transfondo mucho menos trivial del que puede aparentar.

Ficha Técnica

Director: Neil Burger
Guión: Leslie Dixon
Género: Thriller
Duración: 1hr 45min
Reparto: Bradley Cooper, Robert De Niro, Abbie Cornish, Andrew Howard, Anna Friel, Johnny Whitworth, Tomas Arana, Robert John Burke, Darren Goldstein, Ned Eisenberg,
Fotografía: Jo Willems
Montaje: Naomi Geraghty, Tracy Adams
Música: Nico Muhly, Paul Leonard-Morgan
Efectos especiales: Connie Brink, Kevin Zack, Kurt Wunder, Patrick Edward White
País: Estados Unidos
Año: 2011